Aldo, en diálogo con Diario Textual, aseguró que se enteró este jueves, a las 15 horas, cuando lo llamaron desde la sede de Abuelas de Plaza de Mayo. «Nos llamó Estela… Enseguida se vino a mi mente mi hermana Lucía y mi mamá, que tantó buscó a su nieta y no la pudo conocer. Mamá murió buscándola», expresó.
En democracia, su familia su familia pudo reconstruir gracias al testimonio de sobrevivientes que Lucía estuvo secuestrada en el centro clandestino de detención conocido como «Atlético-Banco-Olimpo».
La conocían con el apodo de «anteojito». Los sobrevivientes contaron que estaba embarazada y que fue llevada a dar a luz mientras estaba en cautiverio.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal Número 2 condenó a 14 represores, entre ellos Samuel Miara, el 22 de marzo del 2011, por la desaparición de Lucía.
Finalmente, las muestras del Banco Nacional de Datos Genéticos permitieron la identificación este miércoles y finalmente la nieta recuperada 125 fue contactada este jueves.
«Gracias a la perseverancia de nuestra búsqueda y de todo el movimiento de Derechos Humanos, hoy la nieta 125 puede conocer la verdad sobre su origen«, concluyó el comunicado de Abuelas.
La joven es hija de Lucía Rosalina Victoria Tartaglia y de Horacio Guillermo Cid de La Paz, según varios testimonios, cuando estaba detenida desaparecida en los CCD El Banco y El Olimpo.
Su madre, María, recibió una carta en la que Lucía le anunciaba su embarazo y fecha probable de parto. Lucía militaba en la Juventud Universitaria Peronista y llegado el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976 pasó a la clandestinidad buscando salvar su vida. Fue secuestrada el 24 de noviembre de 1976 en la zona de Flores, Capital Federal.
Existen testimonios de su paso por los CCD El Atlético, El Banco y El Olimpo. Fue retirada de este último con trabajo de parto hacia el Hospital Militar, entre la Navidad y el Fin de Año de 1978. (fuente gentileza: DiarioTextual).-