En 2018, el trapero colaboró con la fundación de la productora, junto al colombiano Cristian Salazar y el productor Daniel Oviedo, conocido en el ambiente como “Ovy on the drums”. Sin embargo, luego de dos años de trabajo en conjunto, Londra firmó engañado un contrato por otros tres años, de los que el cordobés no tenía conocimiento.
Este viernes, William Thomas, juez de la causa, dictaminó que el plazo del memorando del acuerdo terminó en febrero de este año. “Incluso si el lenguaje de los contratos relevantes respaldaba la interpretación ofrecida por Big Ligas del término del acuerdo, esto no se pudo cumplir porque constituiría una restricción ilegal del comercio y conduciría a absurdos resultados”.
Con Big Ligas como productora, Paulo lanzó su primer álbum llamado Homerun, con el que obtuvo una nominación a mejor artista en los Grammy del 2019. Hasta el momento, el trapero tiene más de 220 millones de transmisiones en las diferentes plataformas donde se encuentran sus canciones.