Impacto Informativo – Opinión – «Qué Realicó Queremos»: Para el 2020, el propósito debe ser llenar el contenido e integrarlo

Opinión – «Qué Realicó Queremos»: Para el 2020, el propósito debe ser llenar el contenido e integrarlo

Dic 30, 2019 IMPACTO INFORMATIVO Economia, Locales, Politica, ULTIMO MOMENTO 0

Con un tinte dorado se podía apreciar a corta distancia, en la Nochebuena, el contorno iluminado del edificio de la estación ferroviaria. Parecía un remedo de los tantos anhelos enunciados en discursos, diálogos o propuestas referidos a Realicó que se sucedieron durante sus once largas décadas de existencia. Este Realicó que con el paso de los años, cada vez más se abroquela en sí mismo y pretende mostrar un brillo que resulta cuasi superficial porque se instaló entre los recovecos oficiales e institucionales, para decantar en la cotidianeidad de sus habitantes.

Hace un poco más de un cuarto de sus once decadas, que comenzó a desgranarse la vida social, que ahora se canaliza de otra manera. Espacios sectorizados, con algunas excepciones que desaparecieron hace unos años, recibían franjas etarias fáciles de definir; ademas, las nuevas normas de convivencia contribuyeron a modificar el espíritu de diversión y entretenimientos, ya que se interpretaron como límites demasiado estrictos para una comunidad donde se supone que puede haber acuerdos previos a traves del diálogo.

Beneficioso por un lado-la restricción en la venta de alcohol a los menores, los horarios nocturnos para pubs y boliche, el control de transito-,el celo impuesto condujo a “previas” en casas de familia, a festejos en lugares privados(que dejaron de lado el organizado ,por ejemplo, para el Dia del Estudiante en el Polideportivo Municipal)y al éxodo de los jóvenes los fines de semana a otros pueblos y ciudades.

Como no se permite el uso de pirotecnia en las fiestas, aquellas cañitas voladoras y los fuegos artifíciales-bastante inocentes si se las compara con los petardos y las bombas de estruendo- tampoco surcaron más el cielo realiquense y un silencio poco usual en otros tiempos, se instaló sin reparos en las calles tambien oscuras, con algunos tímidos destellos de comercios que intentaron recordar la fecha.

Despues del brindis, la nada. Ni bailes en los clubes o alguna esquina, ni vecinos en las veredas con buenos deseos para sus congéneres, ni caravanas de autos con gritos de aliento, ni las campanas de la iglesia a medianoche. Se celebró el advenimiento de la Navidad sin otorgarle el sentido estricto de la palabra Natividad, nacimiento-que invita, aun a los no creyentes religiosos, a un comienzo.

Si el dato es que fue un año demasiado intenso y conflictivo, con situaciones que

se caracterizaron por presentar una mayor complejidad, bastaría retrotraerse a fechas anteriores y el argumento es similar. Siempre hubo –más alla de las estadísticas tremendas y dolorosas sobre los que no pueden cubrir sus necesidades primarias-personas con problemas y dificultades mayores que otras y epocas que sobrellevaron con otra perspectiva sus aconteceres y las superaron sin rencores. Y días determinados que por mandato, por costumbre, por predisponer el espíritu (aunque costara el esfuerzo interno)dieron un sentido al encuentro, un objetivo al llamado a compartir y un impulso de hacer aflorar cantidad de recuerdos que convocaban a cierta melancolía para de inmediato hacer estallar la risa.

A ese contorno que se cree luminoso, hay que llenarlo de contenido. De ideas, emprendimientos,propuestas. La población de pertenencia debe propender al desarrollo humano en tanto es el proceso por el cual una sociedad debe mejorar las condiciones de vida de las personas que la conforman. Cubrir sus necesidades básicas como las complementarias y crear un entorno social capaz de respetar los derechos de todos. Para eso, reconocer como función ser capaces de desarrollar el potencial de los seres humanos, incrementar sus posibilidades y respetar su libertad, es una responsabilidad que compete a todos. Medir la calidad de vida en el medio en que se habita, tiene que ver tanto con la expectativa de vida desde el momento del nacimiento, como con el nivel educativo que posee la población adulta y las posibilidades materiales que pueden llegar a alcanzar. Ese proceso, si bien se basa en la economía de las sociedades, con la evolución de la tecnología, los cambios en las relaciones, sobre todo en el ámbito laboral, incorpora otros aspectos que no por ser un conglomerado de pocas personas debe estar ajeno a esas consideraciones. Realicó necesita crecer y la cultura es uno de los enfoques más importantes porque es elemental que los individuos sean capaces de poder ampliar sus opciones y sus oportunidades. Se entiende por aplicar la cultura en ese desarrollo, a la búsqueda para alcanzar el progreso de la comunidad tanto en lo social, económico, político y cultural, para definir de una vez un perfil propio y motivacional que perdure y se proyecte. Como herramienta fundamental, es insoslayable la educación, porque a traves de ella los individuos serán capaces de poder elegir un mejor proceso de desarrollo para poder así elevar al máximo su calidad de vida y su bienestar y-de paso-evitar que el mundo les pase por encima.

Si bien las decisiones son personales, no se debe olvidar la importancia de que la comunidad en conjunto debe involucrarse. Si una sociedad no es capaz de promover el desarrollo -matizado por los deseos, la realidad y las fantasías- será prácticamente imposible alcanzar el bienestar de los ciudadanos. Sin olvidar que quienes orienten al conjunto de personas tengan la capacidad para encarar el cometido; la certeza de que son falibles y necesitan aportes externos desde otra perspectiva y la honradez de no beneficiar a los cercanos a conciencia de su ineptitud; desde la ciudadanía, hacer primar la interacción y comunicación entre sus miembros mientras se tratan de conjurar las inseguridades, conlleva el compromiso de hablar a tiempo, peticionar y ser parte. “¿Qué hace falta para ser feliz? Un poco de cielo azul encima de nuestras cabezas, un vientecillo tibio, la paz del espíritu”,infería André Maurois sin haber conocido nunca ni el nombre de este pueblo.

Ojalá que el 2020 se invoque como el año integrador desde el que Realicó se propuso recobrar su lugar en este norte pampeano y sea capaz de cobijarse para demostrar que sabe abrigar su alma.

Feliz Año Nuevo!!!

Gladys Sago – Directora de La Voz de Realicó